En 1983, salen a la luz unas declaraciones más que inquietantes, tras la entrevista a cinco técnicos de la central, en las que denuncian “inseguridad, fallos en el proceso construcción y falsedad en las inversiones”. Según sus propias palabras, temían por su seguridad física y llegaron a declarar que “Valdecaballeros es un gran fraude al Estado”